Hagamos inolvidable el tiempo que nos ha sido otorgado.
¿Sientes acaso fastidio, hastío y aburrimiento con todas las restricciones que nos han impuesto? Si es así, ¡Ya eres parte del club! La mayoría de las personas con las que estoy interactuando están hartas de cuánto tiempo está tardando esta situación en resolverse.
Francamente, no te culpo por sentirte así. Sin embargo, a mi modo de ver, tenemos dos opciones: podemos estar malhumorados, pesimistas y decepcionados o podemos aprovechar al máximo el tiempo que se nos ha dado.
Una vez que volvamos a vivir una vida normal, ¿no sería bueno poder decirnos a nosotros mismos: “Durante el período de restricciones, aprendí a tocar un instrumento musical, leí libros que han estado en mi estantería por mucho tiempo, desarrollé una nueva habilidad, me reconecté con un pasatiempo de la infancia, descubrí un nuevo pasatiempo, comencé una rutina de ejercicios que me encanta, aprendí a meditar, me reconecté con personas que estimo y extraño, etc.”
En mi caso, decidí aprender a tocar el bajo. Aunque no soy Geddy Lee (Rush) o Paul McCartney, aprender a tocar sus canciones ha sido un bálsamo para el espíritu durante este tiempo.
Así que vamos, rediseña tu día y crea algo en tu vida que te ayude a superar estas restricciones. No importa cuán grande o pequeño sea el cambio, hazlo funcionar, hazlo durar y disfruta de tu logro por el resto de tus días.
Siempre al servicio de tu bienestar,
César