El Tiempo de sueño constituye una de las 7 actividades mentales básicas a las que debemos exponer nuestra mente todos los días para optimizar nuestro cerebro y desempeñarnos al máximo potencial.
El sueño es un proceso vital esencial para mantener nuestro equilibro biológico y psicológico. El sueño desempeña un papel fundamental en la restauración, reparación y rejuvenecimiento de nuestro cuerpo, así como también en el fortalecimiento de nuestro sistema inmunológico. Un sueño de buena calidad nos permite deshacernos de los factores de estrés que nos afectaron durante el día y constituye un elemento esencial en la regulación emocional, en la consolidación del aprendizaje y en el procesamiento de la memoria.
Para poder funcionar de manera óptima, el 95% de los adultos necesita entre 7,5 y 8,5 horas de sueño. Desgraciadamente, algunos no consideran que el sueño sea una prioridad. La falta de sueño no solamente afecta la atención, la lucidez, la concentración, el razonamiento, el juicio y la resolución de problemas sino que también dificulta el aprendizaje eficiente.
Dado que el sueño desempeña un papel importante en la regulación de las principales funciones físicas y psicológicas, no resulta extraño saber que se ha comprobado que dormir menos de 7 horas regularmente puede provocar depresión, falta de apetito sexual, aumento de peso, aumento de la presión arterial y una respuesta inmune deficiente.
No tengas dudas sobre esto: la falta de sueño te convierte en un líder menos eficaz y en un ser humano menos saludable.
A algunos de nosotros se nos puede dificultar establecer prioridades entre el trabajo, la vida social y los compromisos personales, pero la cuestión es simple: si priorizas el sueño, serás un mejor líder, una mejor pareja, un mejor padre y una gran persona para tener cerca. Si deseas aprender consejos para lograr un sueño reparador, pronto estaré publicando artículos sobre el tema.